Alexis “Tutto” Betancourt
Santiago de Chile – San Juan,
Argentina.
¿Qué te acercó a la música?
No sabría cómo definirlo. Desde que tengo uso de razón, mi vieja se
levantaba y colocaba la radio fuerte y se ponía a hacer aseo y cantaba. Si no
lo hacía ella, lo hacía mi hermano del medio, el mismo que me hizo conocer mi
primer instrumento, ya que desde muy chiquito tenía en la casa una banda de
punk ensayando en la pieza que compartíamos, el mismo que desde los tres años
me llevó a mi primer toque de punk rock, luego la calle me acercó al
hip hop, todxs mis amigxs bailaban Kris Kross y Public Enemy, hasta que conocí
el disco en castellano de Cypres Hill.
¿Cuáles fueron tus primeras
incursiones?
En el primer “matricidio” de mi hermano mayor, debo haber tenido cinco o
seis años, y me senté en la bata de la banda ke tokaba y me puse a tokar para
todxs. Ese rekuerdo lo tengo muy presente. Luego empecé a escribir letras para
rapearlas, a eso de los diez años, y en los actos de la escuela si no tocaba
bongó con mi compadre El Piojo, rapeba alguna canción de alguna banda que me
gustara. Con él mismo armé mi primera banda de corte ska reggae punk, muy influenciados
por Todos Tus Muertos Y Mano Negra, a eso de los doce años (yo tokaba la bata y
hacia las partes raggamuffin, y desde ahí no paro...
¿Tenés una metodología de
composición y trabajo?
La verdad que no, me cuesta mucho escribir, pero puedo asegurar que
gran parte de lo que hago da mejores resultados cuando lo hago en la mañana,
con el primer mate.
¿Cuál es el momento más
placentero del proceso musical?
Cuando terminas de maquetear una idea, ando excitado una semana entera.
¿De qué hablan tus canciones?
En este momento de lo político social y mi rol como portador
del micrófono. Me cuesta mucho despegarme de la idea de que el micro tiene
poder y responsabilidades.
¿Qué esperás que pase con tus
canciones?
Mmmmmmmmmm…. Que se compartan de mano en mano como pasaba con los casetes,
y que haya una respuesta positiva o negativa de la gente; que si molesta, que
moleste, que si gusta, que guste... Mi niñez, llena de punk rock, me hizo
disfrutar de la provocación en el escenario.
¿Cuándo empezaste tu camino
solista y por qué?
Hace tres años aproximadamente, después de la ruptura de la
banda de rock en la que yo era percusionista, me sentí re solo y con muchas
cosas que decir. Encima, una terrible tendinitis que no podía ni agarrar el
termo pa´ un mate. Estuve a punto de irme a Chile, a mis pagos. En uno de esos
viajes le dije a un amigo si producíamos un tema, y me dijo que sí. Y le
entramos y de ahí que no paro. Así es que dije: si no puedo tocar, me
pongo a hacer lo que aprendí antes de tocar un instrumento (a rimar).
¿Cómo ves la escena musical?
Uffffff… Difícil pregunta, ¿la escena en dónde? Hoy en día es
más fácil compartir música y colaborar con producciones de otrxs, ya
que si tienés paz ciencia y una compu, es muy fácil. Pero cada vez hay menos
espacios para tocar y los espacios auto-gestionados cada vez los maneja más la
pequeña burguesía, que genera eventos para pagar su “casita cultural”, que no
devuelven nada a la comunidad. Así que es difícil salir a hacer mis
temas donde el rap es simplemente música ajena (como si el indie no lo fuese).
Por eso agradezco a lxs compas artistas y amantes del arte que gestionan
espacios sin importar el género ni nada, nos hace fuertes pero nos cuesta
trabajar colectivamente. Pero la verdad es que cada una de esas experiencias
nos desapega del ego boludo que portamos por ser hijxs de este sistema
patriarkal, de competencia bestial... SALU POR LXS KOMPAS KE ORGANIZAN TOKES
PARA KOMUNIKAR, PARA LA FAMILIA, PARA EL KOMPAÑERO DETENIDO, ETC...
¿Con que músicos de tu entorno
te sentís emparentado?
Con la mayoría, sin ellxs no podría existir artísticamente, cada jam,
cada tonada, cada damajuana abierta, cada toque, cada lanzamiento de discos,
cada evento…, agradezco profundamente a mis colegas por mostrarme mucho más de
lo que uno cree que existe. Solo puedo
decir que los símil de Agapornis
(choreo burgués descarado) son lxs únicxs con los que no siento
ni empatía ni nada.
¿Encontrás alguna identidad
musical propia de tu zona o circuito?
100pre, jajaja… A cada momento hay un chispazo de re-significación.
Si eso no es identidad, entonces no sabría responder la pregunta.
¿Un disco?
Brigadistak Sound System,
de Fermin Muguruza.
¿Una canción?
“Plegaria a un Labrador”, de Víctor Jara.
¿Una frase?
“Nunca Jamás perder la ternura”.
¿Un espacio?
La esquina de la casa de mis viejos.
¿Con quién continúa la serie?
El maestro Fabricio Pérez →
EL MÚSICO POR SU CANCIÓN: “LO
ÚNIKO KE TENGO”
Saludos amigo Tuto, gran alegría saber de Ud.
ResponderEliminarAdrián Campillay